martes, 8 de julio de 2008

Por un horario razonable

La Expo sigue avanzando y poco a poco va puliendo pequeños detalles en su organización. Desde ampliar los espacios donde se puede canjear el vaso solidario a la mayor presencia de su mascota en el recinto. Pero eso no quiere decir que todo vaya bien, ni mucho menos. La música pronto comenzó a dar que hablar, no por quienes la interpretan sino por el volumen más allá de la medianoche. Las quejas vecinales hicieron que el Anfiteatro, de domingo a jueves, adelantara sus actuaciones casi una hora a fin de evitar problemas.

Sin embargo, el otro escenario dedicado a la música, el Balcón sigue con los mismos horarios de programación, 19:00 horas, 21:00 horas y 0:30 horas. Aquí el problema no está en el volumen (escenario pequeño igual a poco volumen, además de estar bien orientado y protegido entre pabellones), sino en lo intempestivo del último pase de cada jornada. Las 0:30 para un concierto un domingo, un martes como hoy o incluso un jueves es algo que se puede hacer un día, dos a lo sumo, pero al tercero hay que pensárselo muy mucho. No es la hora a la que empieza sino a la que acaba y el regreso (y menos mal que la flota de buses funciona casi a las mil maravillas). Este horario es sólo apto para gentes disolutas, sin obligaciones matinales, veraneantes o aventureros extremos poco amigos de la almohada. Esto hace además que una actuación de por sí interesante o curiosa se quede sin su público potencial y al final el concierto (como ya ha ocurrido en varias ocasiones) parezca más triste y desangelado que un velatorio. ¿No sería más razonable adelantar la hora en torno a las 23:00 y que así pudiera acudir más gente, más interesados que casuales que se quedan un minuto?

Mi experiencia personal ya ha hecho que más de una, de dos y de cinco actuaciones a las que habría ido encantado de la vida, esa vocecita que es la razón me halla dicho “¡para!, dónde vas que mañana es día de escuela y toca madrugar”. Y como yo, ¿cuántos habrá?. Amigos lectores, paseantes y curiosos varios, resquemados y asqueados por los horarios en el Balcón de las Músicas, va siendo hora de protestar. Quizás sirva de algo.

6 Comments:

Anónimo said...

Que razón tienes, yo ya paso de de ir entre semana halla lo que halla. No pueden pretender que la gente acuda de forma normal a esas horas si al día siguiente la mayoría tenemos que trabajar.

Que lo cambien ya

Anónimo said...

Aquí otro que se suma a la petición

Alguna vez me he quedado, pero mi jeto a la mañana siguiente era un poema

Ohdiosa said...

yo estoy como tú, julio, me he quedado sin ver más de un concierto por esos inexplicables horarios...qué cabeza "pensadora" habrá confeccionado esos actos a esas horas tan imposibles....tengo el pase nocturno casi sin emplear...anda que si lo llego a saber...

Anónimo said...

Totalmente de acuerdo contigo, que adelanten la hora de las actuaciones para la gente que tenemos que madrugar al día siguiente, por lo menos entre semana.

A ver si nos escuchan y nos hacen caso.

Anónimo said...

Me sumo a la protesta

Anónimo said...

No nos van a hacer ni caso pero por protestar que no quede. ¿Alguien sabe si hay alguna dirección de correo donde enviar las quejas a la expo?