Zaragoza = Ibiza

Bueno quizás sea un poco exagerada la afirmación del titular pero nunca habíamos estado tan cerca de ser como la isla pitiusa como hasta ahora: Tenemos la playa, fluvial eso sí, del nuevo Parque Metropolitano en el meandro de Ranillas, tenemos un paseo que bien podría ser como el de cualquier municipio turístico de costa, con chiringuitos y terrazas a su alrededor como el que hay frente al azud, una de las grandes insignias de Ibiza, el Café del Mar, se ha emplazado entre Helios y el Puente de la Almozara y, para acabar, tenemos noches al más puro estilo ibicenco con el Anfiteatro convertido en la Space o en Pachá todos los lunes y martes de la muestra. En estas fiestas hay gogós (chicas y chicos), percusionistas, iluminación de discoteca, música de baile a tutiplén, por supuesto djs y para rematar un show circense (zancos, malabares, contorsionista...) para entretener visualmente al espectador (quien sabe si dentro de poco no habrá una fiesta de la espuma, ya puestos).

El dj oficial de la Expo es Pedro del Moral, veterano madrileño y fijo en saraos y fiestas de copete tanto en la capital como en la costa del sol o Ibiza. Y que sea un tío bregado en los platos no implica necesariamente que sea un gran dj, más bien es uno de tantos, que pincha música comercial y asequible para todo el mundo (house principalmente, salpicado de hits de ayer y hoy). No será el único que se ponga a los mandos de esta discoexpo pues pronto pasarán por allí otros como César de Melero (un clásico ibicenco y de los más selectos clubs de Barcelona), Tony Verdi (el primer resident de prestigio en la Florida 135 de Fraga), Javi Mula, Deep Josh o Ismael Rivas (Space, Boccacio y también en las ondas de Loca FM) y también una representación del panorama local con Santi B (Oasis) y los tres mejores djs aragoneses (lo dicen revistas como Rock de Lux o Go! Magazine), Carlos Hollers, Chelis (29 julio) e Iñigo Oruezabal (28 julio). Les esperaremos con impaciencia y, mientras, nos conformamos (por desgracia) con Pedro del Morral.

Si van, que lo bailen bien e intenten disfrutar, yo ayer martes pasé un ratito por allí tras los fuegos artificiales y escapé despavorido ante semejante "choú" (escrito así a posta), una mezcla de espectáculo cutre de circo con chulazos y chulazas de gimnasio, el sonido que se va de repente y el señor Del Morral de maestro de ceremonias presentando a sus colegas djs Josepo y Juan Magán.